Después de conducir unas cuantas horas buscando un sitio....al final aparcamos en “nowhere else”, es decir ni sabemos donde....pero la cuestión es que estaba bastante nivelado, y pudimos pasar la noche sin problemas, lo gracioso es que cuando llegas, la noche no te deja ver nada, te da la sensación que no hay nadie, y cuando te acompañan los primeros rayos de sol te das cuenta de que no estabas solo....sobre todo porque la señora de la casa detrás de la carretera nos está mirando...y nosotros tan campantes en nuestra caravana preparando el desayunito...jejeje.
Hoy el desayuno estaba compuesto de una tostada de pan de leña, con tomatito y salmón de la granja del día anterior...que estaba rico rico....ummmm
Hoy el plan es seguir descubriendo un poco el noreste de Tasmania, no hay mucho escrito así que lo mejor es ir y comprobar por nosotros mismos que nos puede ofrecer esta zona.
La primera parada no podía ser otra que Latrobe, ya que estábamos cerca (las vueltas de la noche, jeje) y lo más importante....había una fabrica de chocolate (House of Anvers)...que eso siempre da energía para empezar el día (claro que lo que conviene es saber en que día vivimos, porque resulta que los domingos la fabrica cierra).
En esta parada no solamente disfrutamos del chocolate, en sus variedades, sino que dimos una vueltita por el museo y por los alrededores y encontramos la planta del "Te de manuka", para el que no lo conozca (como le pasó a una servidora), hace unos años se descubrieron las propiedades medicinales de la miel de manuka (la que las abejas hacen de esta planta). Esta miel es originaria de las antípodas, Nueva Zelanda y Australia....
Al pasar por esta “town” vimos que había un mercadillo local, así que decidimos hacer una rápida inmersión en él...
y cual fue mi sorpresa cuando encontramos guisantes.....(ya, ya lo sé...igual tú que estás leyendo esto, dices...y que es lo que tiene eso de interesante....pues lo interesante es que ME ENCANTAN y donde yo vivo.. (en el culo del mundo...ups ..perdón!) no se encuentran....), así que me volví loca y compré una cantidad (que desgraciadamente no me acabé antes de devolver la caravana....pero lo disfruté como una niña chica), lo gracioso es que el matrimonio que nos atendió nos dijo algunas palabras en español (lo cual nos sorprendió a ambos) y después de hablar con ellos un rato y de comprar algún otro producto local más, el hombre nos regaló unas manzanas locales, y nosotros seguimos nuestra ruta.
El día no acompañaba mucho, para decir la verdad, pero eso no nos desmotivó para intentar llegar a la Brunie. Decidimos primero parar en el centro de visitantes, que ya decía la guía que habían remodelado..y tanto....que modernidad....al aparcar vimos un campo de beisbol y quisimos acercarnos a hacer unas fotillos, lo único que hacía tanto frío que nos tuvimos que ir corriendo de alli.
El centro de visitantes, como no, estaba dirigido por dos ancianas señoras, que se sonrieron entre ellas cuando les pregunté que había de interesante en Brunie.....y muy sutilmente nos indicaron que podíamos pasar a la siguiente población, Wymyard. Le pregunté también por el Cheese Tasting Center y me dijeron que debido a los elevados controles sanitarios, ya los turistas no lo podían visitar....pero que podíamos probar los quesos en la tienda del centro...(una vez más los quesos reinantes eran los cremosos y tipo chamember).
Así que después de dar una rápida vuelta para ver algún souvenir, nos fuimos más al norte.
Efrén dice que siempre que conduzco yo hace mal día...pero yo creo que eso no es cierto, porque hay días que ha conducido él que también ha salido malo. Lo que sí es cierto, es que cuando conduzco yo, vamos a campings, con lo cual es mucho más fácil la llegada. Claro que también requiere un trabajo previo, como es llamar para reservar el hueco (esta vez cogimos el último ...menos mal que reservamos) y como hay que hacer el check-in antes de las 6....el día “ es más corto”.
Llegamos a Wynyard y fuimos directamente a Table Cape, intentando adelantarnos a la lluvia....parecía que un rayo de sol se colaba entre las nubes....pero no lo suficiente para resaltar los bellos colores del mar. Desde aquí sale un sendero al faro, y aunque empezamos a hacerlo porque no era muy largo, el hecho de no haber cogido el chubasquero ni nada para proteger la cámara, nos hizo dar la vuelta e ir con la caravana.
En el camino pudimos disfrutar de las plantaciones de tulipanes. Se crea o no, la zona de Table Cape encerraba en sus tiempos un lago de lava hirviente, (se cree de un volcán extinto) y parece que estas tierras rojas, volcánicas son muy fértiles para este cultivo.
Llegamos al faro y tan rápido salimos de la caravana, y tan rápido tuvimos que volver dentro...porque al final la lluvia fue más rápida que nosotros y nos alcanzó....
A tres km al oeste está "Fossil Bluff", unos fósiles de 275 millones de años, que nosotros no vimos....paseamos toda la zona y ni rastro..así que decidimos subir una colina que había a ver las vistas...
(Nota de entrada: esta foto la pongo porque en algunas localizaciones los buzones eran de lo más divertido...¿A que sí?).
Seguimos la ruta y hacemos nueva parada en Warath, pueblo que fue muy rico en su época por la mina y que se desarrolló al rededor de la cascada de la que obtenían el agua
Y tras un pequeño percance con la caravana (que quedará para nosotros) seguimos la ruta, ahora sí...hacia Mount Cradle National Park. Nada más llegar nos dirigimos directamente al camping, antes de que nos cierren. Una vez allí la chica nos explica como funciona este parque nacional, dado que no permiten la entrada de caravanas, así que tenemos que coger un autobús que hace varias paradas según las rutas que quieras hacer. Nos recomienda una rutita corta para esa tarde...y nosotros, ni cortos ni perezosos para allá que vamos., tras localizar nuestro sitio en el camping.
La ruta viene descrita como de nivel 0 en un tramo y nivel 1-2 en el otro (si la quieres hacer circular), así que nos lo tomamos con calma y nada más empezar vemos un equidna que para no variar fotografiamos hasta la saciedad....luego seguimos en un entorno bastante similar a los bosques de laurisilva de las islas canarias (eso sí....un poco más fríos) y Efrén dice de hacer un par de tomas de cámara lenta....pero que gran descubrimiento ha hecho en este viaje...porque nos lo estamos pasando pipa con la tontería....menos mal que no había nadie....porque sino...se nos corta un poco el rollo...
Así que antes de que se haga de noche (aquí anochece bastante tarde), volvemos al camping, que aún nos queda la ducha y la cenita....y mañana toca madrugar para poder coronar Mountain Crandle....
Frío, ¿quién dijo frío?....resulta que voy a las duchas y la zona es abierta...pero señores...porque no le ponen puertas????...para que el calorcito del agua caliente no se vaya y se quede en el ambiente....pues no...no hay puertas y el frío es tremendo....sólo pienso...si tengo frío con la camiseta térmica de lana merina y los leotardos...¿cómo me voy a desnudar? y lo peor...¿lavar el pelo?...que no tengo secador....!!!!!! (lo tuve que sacrificar al preparar una maleta para seis semanas....y teneindo en cuenta que veníamos al final de la primavera principios de verano....no pensé que fuera un imprescindible....Que equivocada que estaba....argggg)
Ya sabemos que solo las situaciones extremas te hacen desarrollar el ingenio...y esta ocasión requería que así lo hiciera.... así que decidí traer “la calefacción de la caravana al baño”. La caravana viene dotada de las cosas imprescindibles, como pueden ser los utensilios de cocina, una escoba, un recogedor, una televisión (que no sintoniza ningún canal, pero algún día pudimos ver alguna peli desde el disco duro externo) y un pequeño radiador....Así que me fui al baño con el pequeño radiador....pero...debo de confesar que la potencia del mismo era casi igual que el soplido de un niño....así que no fue muy eficaz...y tuve que ingeniar un plan B.
El plan B fue ponerme en cuclillas debajo del secador de manos que estaba colocado a la altura de la cintura.....así que imaginaros la situación.....yo moviéndome el pelo con una mano....poniendo la otra en cierta posición para activar que el aparato echara aire caliente.....en fin...menos mal que tampoco entró nadie en ese rato, porque sino sus risas estaban garantizadas.
Un rato después, y tras contractura postural de servidora, me volví a la caravana con el pelo húmero y con los dedos cruzados para no coger una pulmonía.
Ahora solo quedaba cenar, leer un rato y a dormir mi estrella.
